Tegucigalpa. El 3 de abril de 2025, Donald Trump, presidente de Estados Unidos, anunció la imposición de un arancel del 10% a todas las importaciones globales, incluyendo a los países de Centroamérica, como parte de su «Día de la Liberación». Esta medida, que rompe con el libre comercio establecido por el CAFTA-DR (Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana), ha generado incertidumbre en la región. Mientras Honduras, un exportador clave de café y textiles, evalúa el impacto, otros países centroamericanos también reaccionan con cautela o críticas, temiendo retrocesos económicos en un contexto de comercio previamente libre de aranceles con EE.UU.
Honduras: Preocupación por el impacto en el café y las exportaciones
En Honduras, la reacción inicial ha sido de cautela. Una fuente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) señaló a EFE que es “muy apresurado” evaluar los efectos de los aranceles del 10%, efectivos desde el 5 de abril, con tasas adicionales previstas para el 9 de abril. Sin embargo, el economista Julio Raudales advirtió que “los aranceles son dañinos” y afectan principalmente a los consumidores del país que los impone, al generar inflación. Raudales destacó la incertidumbre sobre si productos protegidos por el CAFTA-DR, como el café y los textiles de maquila, estarán exentos. “Si están incluidos, estamos fritos”, afirmó, subrayando el riesgo para las exportaciones hondureñas, que dependen en gran medida de EE.UU.
Guatemala: Denuncia al CAFTA-DR y apuesta por negociaciones
Guatemala, otro peso pesado en exportaciones como café y banano, ha sido más contundente. El gobierno guatemalteco denunció que “los aranceles anunciados son violatorios a las disposiciones del DR-CAFTA”, según informó EFE. La Asociación Guatemalteca de Exportadores (AGEXPORT) instó a las autoridades a prepararse para negociar excepciones con EE.UU., destacando retos pendientes como competitividad, facilitación comercial y problemas de propiedad intelectual. Guatemala busca mitigar el impacto en su comercio con EE.UU., su principal socio, mientras espera más detalles sobre la política arancelaria de Trump.
Costa Rica: Diálogo y análisis ante una «nueva realidad»
Costa Rica, líder regional en exportaciones de instrumentos médicos, adoptó una postura pragmática. El Ministerio de Comercio Exterior indicó a EFE que está recabando “más información” para analizar la medida “en detalle” y planea dialogar con EE.UU. para asegurar condiciones favorables para sus productos. El presidente Rodrigo Chaves, en su conferencia semanal, señaló que “si la marea sube y levanta todos los botes al mismo tiempo, es una realidad nueva, y no nos están castigando en ese sentido”, sugiriendo una visión menos alarmista frente al arancel uniforme del 10%.
El Salvador: Costos industriales y dudas sobre lealtades políticas
En El Salvador, la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI) alertó sobre el encarecimiento de maquinaria y retrasos en entregas debido a los aranceles, según reportó El Mundo. Jorge Arriaza, presidente de la ASI, destacó que equipos como transformadores eléctricos podrían tardar hasta cuatro o cinco años en producirse para satisfacer la demanda global, afectando sectores clave. La analista Cecilia Medrano añadió que el arancel del 10% demuestra que “las supuestas cercanías políticas con el ‘trumpismo’ no han influido en las decisiones económicas”, desafiando expectativas de un trato preferencial.
Nicaragua: Una excepción con aranceles más altos
Nicaragua enfrenta un trato diferenciado: Trump anunció un arancel del 18% para este país, superior al 10% general. Aunque la reacción oficial ha sido reservada, la medida podría impactar sus exportaciones textiles y agrícolas a EE.UU., su principal socio comercial. La cautela regional también se refleja aquí, con el gobierno esperando más claridad sobre cómo se implementarán estas tarifas, que entrarán en vigor junto con las demás el 5 y 9 de abril.
Panamá: Impacto limitado por bajo volumen exportador
El economista panameño Felipe Argote descartó un impacto significativo para Panamá, según EFE, debido al bajo volumen de sus exportaciones a EE.UU. Aunque el país no escapa al arancel del 10%, su dependencia comercial con Estados Unidos es menor que la de sus vecinos, lo que le permite mantener una postura más relajada frente a la política de Trump.
Análisis regional: Un retroceso al siglo XIX
Ricardo Barrientos, director del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), criticó la política arancelaria de Trump en declaraciones a EFE: “Nos está retrocediendo al siglo XIX en materia de exportaciones e importaciones”. Barrientos argumentó que imponer aranceles abandona los avances del libre comercio del siglo XX, como el CAFTA-DR, que eliminó aranceles entre Centroamérica y EE.UU., afectando a toda la región, incluido Honduras, en su relación comercial con su mayor mercado.







